El diseño y los hábitos de lectura « MiMoriarty

El diseño y los hábitos de lectura « MiMoriarty.

autor: http://mimoriarty.wordpress.com/about/ Date: 12/09/2012

Hace bastante tiempo que deseaba dedicar una publicación a uno de los temas que más preocupan a los diseñadores, redactores y editores de revistas. La transformación de los hábitos de lectura. Podría parecer, en principio, un tópico para un blog especializado en redacción o periodismo, pero como bien sabéis la misión principal del diseño gráfico es solucionar problemas de comunicación, y este que ocupa esta publicación es uno de los más complejos de los últimos tiempos.

Todos habréis escuchado decir en más de alguna ocasión que leer en la pantalla de un ordenador es mucho más difícil y cansado que hacerlo en papel. Sí y no, más adelante me extenderé sobre este particular. Investigadores muy reputados confirmaban a finales del siglo pasado que la lectura en la pantalla del ordenador era más lenta que sobre el papel. Se aseguraba también que el tiempo medio de lectura se reducía cuando se usaba un ordenador.

Personalmente he tenido la desgracia de tener que soportar en más de una ocasión que los ‘jóvenes’ -no sabría precisar que rango de edad comprende en este caso-, de hoy en día no saben leer.

Desde hace más de diez años los profesionales del periodismo y los editores de todo el mundo intentan crear un estilo de escritura propio para el periodismo digital que se adapte al espacio disponible en pantalla. Para conseguirlo se plantean diferentes posibilidades:

  • La más evidente reducir el texto, puesto que ya no es necesario “llenar” la página, o el espacio marcado, cada artículo tiene únicamente la extensión que es requerida para comunicar su mensaje.
  • Usar el scroll de pantalla cuando la longitud del texto supere la misma.
  • Recurrir a los hipervínculos para fraccionar partes del texto que puedan considerarse adicionales.
  • Cambiar la pirámide invertida por otra estructura que permita sintetizar la información.

Un estudio mucho más reciente de la UPV-EHU llega a unas conclusiones completamente opuestas. Basado en un experimento realizado con 40 estudiantes universitarios demostraba que sobre el mismo texto los lectores sobre pantalla eran más rápidos y comprendían mejor lo que leían. Los datos recogidos de estos lectores eran homogéneos respecto a los lectores en papel. Sí deseáis leerlo al final de esta publicación podéis encontrar un vínculo al informe completo.

Sin necesidad de informes, ni estudios, vosotros mismos podéis sacar la verdad de vuestra propia experiencia. La capacidad de leer sobre la pantalla se desarrolla con el uso. Al principio es fácil sentir cansancio, dolor de cabeza, irritación ocular y falta de concentración. Las pantallas retroiluminadas, no digamos los monitores CRT ,ya prácticamente en desuso, tienden a producir estos efectos después de un par de horas de lectura. Con el hábito estas molestias van desapareciendo. ¿Cómo sino podría nadie cumplir una jornada de trabajo completa delante de un ordenador?

No culpéis a los lectores por su falta de atención: una atención reducida a los detalles es una habilidad necesaria para hacer frente a la saturación de los medios de comunicación. Todos los creadores de contenido deben trabajar dentro de esta limitación. Thad McIlroy – ‘The Future of Publishing’

Quizás la mejor explicación a los hábitos de lectura actuales se pueda encontrar en la cita de Thad McIlroy. Hace unos días escuché decir en una conferencia que en el año 2013 se generará en internet cada diez minutos la misma información generada entre el principio de internet y el 2012. Teniendo en cuenta que la mayor parte de ésta es completamente prescindible es normal que los hábitos de lectura se hayan transformado de forma que el lector pueda cribar rápidamente en busca de lo que considera importante en cada momento.

Ahora bien, ¿cómo afecta esto al diseño de la información? A la vista de estos datos queda claro que las publicaciones en papel tal y como son actualmente están a punto de extinguirse, si no se adapta rápidamente quedará reservada para publicaciones muy especializadas. La web 2.0 está diseñada para ser mucho más clara y concisa que su predecesora, sin apenas texto, en las webs de nuevo cuño es posible aprender toda la información necesaria de un sólo vistazo a través de animaciones, vídeos y efectosHTML5 que eliminan la necesidad de hacer scroll o llamar a una nueva página para ampliar la información.

Tablets y smartphones se han demostrado como dispositivos versátiles para leer libros, navegar, ver películas o escuchar música… pero ¿qué ocurre con los magazines digitales?, si no se sintetiza la información, transformando la experiencia de leer en una interacción dinámica y fluida entre el texto, las imágenes, efectos y los multimedia pero sin abusar de todo ello, es muy posible que las magazines para dispositivos digitales se conviertan en flor de un día. El usuario tiende a pasar las páginas pensando: “¿haber qué hay que hacer aquí?¿qué va a pasar ahora?” buscando más la novedad de los efectos que la información contenida, y cuando esos efectos no le satisfacen o le desilusionan pierde el objetivo y desecha la publicación, como quien ha visto unos fuegos artificiales y cuando terminan solo es capaz de ver un firmamento vacío.

Es conveniente que al diseñar este tipo de publicaciones no olvidéis que la tarea del diseño gráfico es comunicar una información. Hay que atraer primero al lector hacia lo que es realmente importante y engancharlo antes de poner a trabajar todas las posibilidades que el nuevo medio ofrece.

A&8s

Enlaces:

  • Sitio oficial de Thad McIlroy, ver aquí.
  • Informe: “La información en la prensa digital: redacción, diseño y hábitos de lectura”, veraquí.
  • Wikipedia