Feria del Libro de Madrid: bueno, bonito y barato | Antinomias Libro

Feria del Libro de Madrid: bueno, bonito y barato | Antinomias Libro.

03/06/2013 Manuel Gil

La FLM 2013 comenzó este fin de semana. A diferencia de la pasada edición, que comenzó en torno al 24 de mayo, esta vez se ha inaugurado el día 31. Este año el comienzo de la feria coincide con el hecho de que la gente ya ha cobrado su salario (los que lo tienen, que cada vez son menos), a diferencia del año pasado que comenzó muy floja el primer fin de semana y nos autoengañamos pensando que el problema radicaba en que la gente no había cobrado… los días fueron pasando y la feria no remontó, acabó siendo un desastre sin paliativos.

¿Qué podemos esperar este año? Obviamente la atonía y contracción del consumo es muy superior a la del año pasado, los bolsillos están esquilmados y hay miedo, mucho miedo. Los datos de algunas ferias de provincias celebradas recientemente (Sevilla, Cádiz, etc…), parecen apuntar a un ligero repunte del ciclo de consumo, los meses de 2013 que llevamos han sido de cerrar la persiana, las librerías han sufrido enormemente acumulando descensos que ponen a multitud de librerías al borde del cierre, por tanto parece aventurero establecer un pronóstico, pero me voy a mojar: la inexistencia de compras y visitas a las librerías entre enero y mayo me hacen pensar en un pequeño repunte de ventas, la gente no ha comprado libros en estos meses y la feria puede hacer que muchos lectores compren libros de cara también al verano. El problema de estos ciclos de consumo es que presentan varias características que los hacen preocupantes:

  1. Cuando la gente lleva mucho tiempo sin comprar libros acaba en la feria comprando el bestseller de moda, aquel que algunos amigos/as le han dicho que hay que leer. O sencillamente el del personaje mediático del momento. En la feria estos personajes abundan hasta aburrir.
  2. Fuerte tendencia a la uniformidad absoluta de la oferta que presentan las librerías. Todas se concentran en los mismos títulos y autores y en editoriales de gran tamaño. Muestran lo que se vende sin esfuerzo y necesidad de prescripción.
  3. Tendencia a hacer de las «firmas» de personajes fuertemente mediáticos el motor de venta.
  4. Poca visibilidad de pequeños sellos editoriales en las casetas de las librerías.

Contrastando las ventas de este primer fin de semana con otros editores coincidimos en que la feria ha comenzado algo mejor que el año pasado, hay un ligero aumento de ventas, pero con cifras que se alejan todavía mucho de ediciones anteriores, estamos por tanto en este primer fin de semana ante un tímido repunte, obviamente no compensa ni de lejos la brutal caída acumulada este 2013. Hay gente, mucha gente, es verdad, pero compran poco, y la horquilla de precios superiores a los 20 euros comienza a ser como subir al Everest sin oxígeno. Y otro dato curioso, la gente paga menos con tarjetas de crédito. Si en ferias pasadas la proporción de tarjetas frente a efectivo era de 45%-55% este año las tarjetas han descendido hasta un 30%-70%. El personal no se fía ni de bancos ni de tarjetas. Así de claro.

En cualquiera de los casos, la temperatura comercial de la feria es templada, frente a la frialdad extrema del año pasado. La Feria es un indicador de la situación del sector, que presenta un fallo multiorgánico severo, y lo fundamental no es como empieza sino como acaba. De hecho tengo miedo de que en vez de ir en aumento el gasto en la feria se estabilice esta semana y descienda conforme avance el mes de junio.

Y comparto unas reflexiones sobre varios asuntos candentes de la feria que siguen siendo polémicos:

  • El sorteo «teledirigido» es impresentable se mire por donde se mire. Es mucho más justo el sorteo puro, todos a un mismo bombo y a esperar donde te toque. Aunque cada año veo más claro que la feria hay que organizarla de otra manera, comenzando por ordenar la oferta, como se hace en muchas ferias donde los pabellones agrupan la oferta de perfiles editoriales similares.
  • La Fundación. El tema de que sea una Fundación del sector en su conjunto con la administración madrileña la que organice la feria es una excelente idea y la única vía para atraer patrocinadores. Se lleva negociando este asunto desde 2011, sin avances significativos, parece que la actitud cerrada de los libreros lo impide.
  • Presencia digital. No se puede entender que no se abran las puertas a la edición puramente digital y a las empresas de distribución digital, ya sea por descarga o nube. ¿Por qué está solamente Samsung y no los demás?

No se trata de hacerle a la feria una «enmienda a la totalidad», pues la feria tiene muchas cosas buenas, pero si es evidente que debería analizarse en profundidad, una comisión de trabajo que integrase a todos los agentes, parece sensato plantear, desde mi punto de vista ordenar la oferta parece imprescindible, son multitud los visitantes que se quejan de la dimensión de la feria, una ordenación de la oferta segmentaría al público en función de intereses concretos y haría la feria más organizada.

Comento aquí una iniciativa de la empresa Mr. Garamond para la feria del Libro de Madrid, esta empresa, enfocada a la creación de contenidos en soporte fijo y digital así como al marketing cultural y gestión de actividades culturales, han desarrollado una APP gratuita de la Feria del Libro de Madrid descargable desde su página webwww.mrgaramond.com y también desde la Apple Store y Google Play, o desde el dispositivo a www.ferialibromadrid.com/app . La App está disponible de manera gratuita para móviles y tabletas. Con un diseño sencillo basado en una fácil navegación, las secciones de la App son: expositores, mapa, actividades, firmas, ediciones anteriores e información práctica del evento. Para facilitar la visita a la Feria, el visitante podrá guardar en sus Favoritos los expositores que más le interesen. El mapa le ayudará a localizar la situación de las casetas y los pabellones. Durante las tres semanas de la Feria, el visitante tendrá la información actualizada de eventos y firmas. Con esta App, Feria del Libro de Madrid enriquece la visita al evento que cada año celebra el mundo del libro en el Parque de Retiro de Madrid.

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